El Blog de Accede Me

Debido al importante presupuesto que significa solventar los problemas técnicos de accesibilidad que genera una página web o una aplicación web que no se ha desarrollado siguiendo las pautas recomendadas de accesibilidad desde su diseño, AccedeMe recomienda el uso de plugins o widgets de accesibilidad que aportan a las página web una accesibilidad inicial.

Incluso si se considera viable la inversión en el re-diseño del sitio web siguiendo las pautas de accesibilidad consideramos que este tipo de productos son un paso adelante en los esfuerzos de una accesibilidad digital global. Aportan herramientas y ajustes extra que cubren un abanico mayor de ayuda a personas con discapacidad, incluyendo a nuestros mayores que sufren la brecha digital. Los plugins de accesibilidad son un tema controvertido. Aclaremos qué son y cómo afectan a la accesibilidad.

Un plugin de accesibilidad es un código JavaScript que está escrito con el objetivo de ayudar a quienes acceden a un sitio web o aplicación web. El código del plugin se aplica después de que el navegador procese el sitio web o la aplicación web para transformarlo y añadirle unas herramientas que suelen ser ajustes bajo demanda.

En términos generales, existen dos tipos de plugins de accesibilidad:

1. Soluciones invasivas. 2. Complementos a la accesibilidad subyacente.

Los widget de accesibilidad existen desde hace tiempo. Históricamente, las empresas desarrolladoras de estos complementos han pretendido ser la solución definitiva a la accesibilidad web. Prometen que con su producto no hay nada más que hacer pues convierten una página web en accesible por arte de magia.

Para conseguir este propósito manipulan el código de la página web para alcanzar la pretendida accesibilidad. Esta es una práctica invasiva por que el navegador no presenta la página diseñada si no que presenta una página modificada a voluntad del desarrollador de dicho widget.

Para conseguir este propósito manipulan el código de la página web para alcanzar la pretendida accesibilidad. Esta es una práctica invasiva por que el navegador no presenta la página diseñada si no que presenta una página modificada a voluntad del desarrollador de dicho widget.

Para AccedeMe, a igual que la mayoría de profesionales de la accesibilidad web, las pautas a seguir son las WCAG 2.1 en su nivel AA. De dichas pautas solo el 20% aproximadamente se pueden detectar su cumplimiento automáticamente. De dicho 20% aproximadamente la mitad se pueden solucionar de forma automática. Ningún widget del mundo puede pretender y mucho menos asegurar que aporta la accesibilidad a una web, imposible.

Consideramos que las empresas que comunican que con su widget se consigue que una página web sea accesible es marketing fraudulento que pretende aprovecharse del poco conocimiento real sobre la accesibilidad web.

AccedeMe ha desarrollado un widget con el objetivo de complementar a cualquier accesibilidad subyacente en la página web en donde esté integrado.

Las pautas WCAG establecen unas medidas a tener en cuenta en el desarrollo de una página web y tienen en cuenta un gran diversidad de situaciones de discapacidad. Sin embargo no cubren todos los casos. Es ahí donde el widget de AccedeMe cobra sentido.

Al hablar de discapacidad todo el mundo recuerda los casos más limitantes, por ejemplo ceguera, sordera…, sin embargo existen multitud de circunstancias que se ven afectadas por las barreras a la accesibilidad web. Con los ajustes personalizables del widget de AccedeMe pretendemos dar herramientas que les ayuden.

Al hablar de discapacidad todo el mundo recuerda los casos más limitantes, por ejemplo ceguera, sordera…, sin embargo existen multitud de circunstancias que se ven afectadas por las barreras a la accesibilidad web. Con los ajustes personalizables del widget de AccedeMe pretendemos dar herramientas que les ayuden.

Existe numerosa controversia sobre los plugins o overlays. Es innegable que si el código que produce una web o una aplicación web se ha diseñado siguiendo las pautas de accesibilidad reconocidas tiene mucho ganado. Sin embargo la realidad es muy diferente: La grandísima mayoría de páginas web del mundo no se han construido considerando ni siquiera la más mínima noción sobre este tema y ni siquiera se lo plantearían. Es en estos casos en dónde un plugin como el de AccedeMe tiene todo el sentido. Creemos que es mejor tener un widget que no hacer nada.

Las personas no son un problema a resolver.

La discapacidad es un fenómeno que la sociedad suele obviar. Debido a esto, hay muchos malentendidos sobre la discapacidad y más cuando afecta a las experiencias digitales.

La gran mayoría de plugins se venden a gerentes y empleados públicos de alto nivel que toman decisiones como una «solución instantánea» a los problemas de accesibilidad. Incluso algunos usan la amenaza de una demanda como el principal factor convincente. Esto hace dos cosas: 1.  Deja fuera de la conversación a los expertos en accesibilidad digital, y 2. Enmarca toda la experiencia como una forma de evitar riesgos, en lugar de una forma de garantizar el acceso.

Desde AccedeMe desaconsejamos estos enfoques. Nuestra herramienta se ha diseñado por un equipo de expertos en accesibilidad web para ser útil a quién lo necesita. No podemos re-diseñar la página que ya ha sido construida, si embargo podemos realizar un trabajo de acondicionar lo existente lo más posible a las pautas de accesibilidad web reconocidas internacionalmente.

En términos generales, existen dos tipos de problemas de accesibilidad: 1. Problemas que se pueden detectarse mediante un conjunto de reglas de programación. 2. Problemas que requieren una evaluación humana.

Un ejemplo de esto es la descripción alternativa de una imagen. Las reglas de programación pueden verificar si una imagen tiene un atributo alt (texto alternativo a la imagen cuando esta no se puede mostrar). Sin embargo, las reglas de programación no pueden determinar si el texto alternativo o la descripción es precisa y es correcta contextualmente, especialmente si la imagen se usa con un propósito temático o decorativo.

En AccedeMe tenemos dos enfoques para proporcionar la mejor descripción alternativa a una imagen: En primer lugar nuestros algoritmos de Inteligencia Artificial evalúan cada imagen y junto con su contenido y la temática de la web en dónde se encuentra y le dan un primer texto que posteriormente será evaluado por un responsable del cliente que validará esa propuesta. A partir de ese momento esa descripción será la que se muestre a todos los visitantes de esa web.

Hay algunas voces que sostienen que los complementos y overlays que pretenden «solucionar» automáticamente este tipo de problemas no puede cumplir sus promesas. Incluso hay muchas demandas presentadas contra empresas de complementos que reflejan esto. Es innegable que el trabajo de los auditores es importante, pero a la vez muy costo. Un complemento que realmente se tome su trabajo en serio deberá ofrecer soluciones que incluyan a un auditor y al responsable del sitio web.

Un auditor, sin la ayuda del propietario del sitio web, puede mal interpretar la razón por la que una determinada imagen está en un lugar determinado de una página web y ofrecer al visitante una experiencia equívoca. Nadie está libre de cometer errores.

Los responsables de las páginas web que escogen nuestro plugin tienen herramientas que ayudan a los equipos de diseño y desarrollo de sitios web o aplicaciones web a aprender cómo no repetir las mismas decisiones que crearon la experiencia inaccesible.

La gran mayoría de los plugins existentes en el mercado no proporcionan la información necesaria para evitarlo. Esto significa que los diseñadores y desarrolladores no desarrollarán sus habilidades y los mismos errores se repetirán una y otra vez. Si la accesibilidad se considera como algo superficial, existe una alta probabilidad de que el alcance de los problemas de accesibilidad aumente exponencialmente.

Con AccedeMe ofrecemos la posibilidad de «configurar y olvidar». Desde el panel de control el propietario de un sitio web o alguien de su equipo puede, en todo momento, modificar y/o actualizar la respuesta de nuestro plugin. Una vez que se ha configurado sólo se deberá revisarlos cuando se modifique la página.

Muchos complementos están diseñados para lo que venden, evitar las demandas, y no lo que realmente deberían ser: una herramienta de ayuda.

Es verdad que la gran mayoría de plugins ofrecen recordar las preferencias del usuario, sin embargo el usuario no tiene forma de identificarse. Por ello sólo recuerdan esas preferencias en determinados casos.

En AccedeMe pensamos que es importante que un usuario pueda identificarse, eso le asegura disponer de sus preferencias en cualquier circunstancia. En nuestro caso dicha identificación no implica una pérdida de privacidad ya que solo vinculamos un correo electrónico a unas preferencias de ajustes.

La privacidad y la discapacidad están estrechamente relacionadas. Existen muchas preocupaciones sobre ser identificado como un usuario de tecnología de asistencia sin consentimiento. Sin embargo es imprescindible conocer las necesidades de cada persona individualmente para poder ofrecerle al experiencia que necesita.

Otro discurso es la responsabilidad de quién obtiene esos datos. En AccedeMe estamos comprometidos con el usuario y para nosotros la privacidad y la intimidad son una prioridad. No guardamos datos personales más allá de un correo electrónico y un conjunto de selecciones. Nada que identifique a la persona en concreto.

Algunos productos de complementos no revelan lo que hacen con la información que recopilan, incluida la venta de la información a terceros. En AccedeMe, el no disponer de dicha información nos permite asegurar la imposibilidad de realizar dichas prácticas ilegales.

Debido a que aún hoy en día la discapacidad crea discriminación, desafortunadamente existe una fuerte correlación entre discapacidad, desempleo y/o subempleo. Debido a esto, se puede afirmar que las tecnologías de accesibilidad se suelen usar en dispositivos más económicos y por lo tanto de menor potencia.

Los complementos ejecutan una «capa» adicional de JavaScript sobre la página web. Más código a ejecutar significa más necesidad de recursos. Esto ralentiza un sitio web o una aplicación web y, en casos extremos, puede hacer que todo se bloquee. La posibilidad de que se bloquee o se ralentice hasta el punto de quedar inutilizable aumenta en los dispositivos de menor potencia.

En Accedeme somos conscientes de esta posibilidad. Debido a nuestra orientación totalmente dirigida hacia el usuario usamos técnicas de programación y de carga de complementos selectivos para evitar estas situaciones.

El malware es un software diseñado para subvertir y dañar el sistema en el que se ejecuta.

Ciertos complementos incluyen código que intenta detectar y confundir a las herramientas automatizadas de verificación de accesibilidad como Axe o WAVE. Esto evita que alguien audite con precisión el estado real de su sitio web o aplicación web.

Como llaman al código que está controlado por otra persona, también existe la posibilidad de que el control sobre este código sea secuestrado. Por ejemplo, un conocido complemento de lectura de los textos de páginas web fue pirateado y le incluyeron un código que servía para minar criptomonedas.

Antes de utilizar un complemento cualquiera, le animamos a que conozca como desd AccedeMe ayudamos a los usuarios que lo requieren a que obtengan unas experiencias digitales satisfactorias.